Para nuestras vacaciones en Navarra teníamos muy claro que queríamos ir al valle del Baztán. También teníamos claro que queríamos estar en Urruska, una casa rural que ya habíamos visto desde hace tiempo en Internet.

Urruska es un caserío rehabilitado del siglo XVIII a unos 20 minutos de Elizondo. Para llegar hay que coger un camino estrecho por la montaña donde te cruzas con ovejas y caballos. Hay que tener en cuenta que es un alojamiento para familias con niños a partir de 6 años. 

Urruska es una casa pionera, ya que en el año 1999 ya empezaba a funcionar como casa rural.

La casa tiene 4 habitaciones de las cuales 1 habitación es familiar. Es donde dormimos nosotros. Son como dos habitaciones interconectadas, una con cama de matrimonio y una con dos camas individuales. Las dos habitaciones tiene baño. Hay un salón común con chimenea, muchos libros (por supuesto de Dolores Redondo), algunos juegos y TV.

Anexo está el comedor, donde Mari-Jose sirve desayunos y cenas. Todas las comidas con caseros, con productos de granja y cercanía. 


Fuera, los niños pueden jugar en el jardín, donde tienen tobogán, columpio y cama elástica. El jardín tiene unas vistas preciosas sobre el valle.



Ya que la casa también es un granja en funcionamiento, se puede vivir de cerca las labores de la granja. Nuestros peques ayudaron en la recogida de los huevos. La tortilla de esa noche estaba deliciosa por supuesto!

Otra cosa que también les encantó era acercarse a los cerdos que andaban sueltos y darles de comer las castañas que habían encontrado en el bosque.

Vimos dos corderitos recién nacidos, que podíamos tocar cuando ya tenían un día de vida.

Además, ver los perros pastores en acción era todo un espectáculo. Detrás de la casa se puede seguir rutas de senderismo, a nosotros nos gustó mucho dar un pequeño paseo por la tarde por los alrededores de la casa o jugar en el jardín.

Y por la noche, después de cenar os recomendamos salir a echar un vistazo al cielo. Se ve la vía láctea en todo su esplendor.